De salir de Abengoa en un ERE a patentar el tabasco andaluz: el caso de Salsas Quietud
Con la naranja amarga de Sevilla o el vino de Jerez, la empresa busca afianzarse en el mercado gourmet y seguir explorando sabores.
Artículo de INVERTIA | El Español (05/09/2021). Fuente original: https://www.elespanol.com/invertia/empresas/distribucion/20210905/abengoa-ere-patentar-tabasco-andaluz-salsas-quietud/609189504_0.html
Si Abengoa fue, ha sido y es noticia por su complicada viabilidad económica, ahora también lo es por ser cantera de emprendedores. Sus reestructuraciones han provocado la salida de miles de profesionales que han tenido que reconvertir sus carreras profesionales. Es el caso de Julio Estalella, el CEO de Salsas Quietud y padre del tabasco andaluz.
Ingeniero de profesión, Estalella era uno de los directivos de la empresa sevillana que en 2019 lanzó un nuevo expediente de regulación de empleo. En junio se materializó su salida de la compañía y fue cuando empezó a trabajar en su próximo proyecto profesional.
Tras mil y una vueltas al ‘coco’, el sevillano se fijó en el negocio de las salsas, concretamente en las picantes. Una vez con la idea en mente se topó un capítulo del mítico programa de televisión ‘Así se hace’ que explicaba cómo se hacía la salsa tabasco. Es aquí cuando empieza su rudimentario i+D.
“La receta fue casi una casualidad”, confiesa Estalella. En declaraciones a Invertia explica que comenzó a hacer las pruebas en la cocina de su casa y reunió a sus amigos con pinches de cocina. El anfitrión optó por un asado argentino y los invitados escogiendo la salsa casera como la favorita de la cita.
Con el visto bueno, empezó la investigación del sector. “Empezamos a analizar el mercado de las salsas independientes en España, Estados Unidos, México, la India… Es un negocio que en los últimos años ha crecido muy rápidamente y ha variado sus tonos de picante”, analiza el promotor de la idea.
Toque andaluz
Con el bagaje aprendido y aprueba de base y error, Julio Estalella da con la clave. Crea una salsa estilo luisiana similar al tabasco pero en su versión más andaluza. Entre sus ingredientes se encuentran la cáscara de la naranja amarga de Sevilla, el vinagre y el vino oloroso de Jerez de la Frontera (Cádiz).
“Nos hemos llevado un año trabajando el producto hasta que hemos industrializado el proceso”, explica el CEO cuya fábrica se ubica en Sevilla. En mayo de 2020 es cuando el empresario empieza su andadura con la empresa que ya ha traspasado las fronteras andaluzas.
Además de la venta online, está presente de forma física en Madrid, Barcelona, Oviedo, Cádiz o Sevilla, entre otras. Los objetivos actuales pasan por ganar terreno en los comercios gourmet de todo el país y en cerrar acuerdos con las grandes distribuidoras.
Además, el portavoz de la empresa confía en explorar nuevos proyectos para combinar más sabores y ampliar la gama de productos. Todo ello bajo la filosofía “quietud” centrada en una actitud “calmada y tranquila”, idea que da nombre a la compañía sevillana.
